En Toscana, Italia, existe un taller de artesanía dedicado a la reproducción de esculturas en mármol, donde trabajan artesanos que están tras las mejores reproducciones de escultura, muy difíciles de diferenciar de las originales.
Todo artista necesita rodearse de los mejores profesionales para que su obra llegue a materializarse de la mejor forma y con el resultado más próximo al que el artista ideó en su día.